
Hace unos días la amiga Elva, en un arranque de simpatía y generosidad tan poco frecuente como el paso del cometa Halley, me regaló unas acuarelas que no utilizaba. Bueno, también algunas pinturas acrílicas y unos cuantos pinceles.
He de suponer que últimamente el Jose debe recitarle bellos poemas en el curro porque sinó no se entiende tanta generosidad

Últimamente estoy en crisis creativa y no me sale nada a derechas, pero las acuarelas han tenido un efecto balsámico en mi perturbada mente cuando pasaba una época de sequía. Desde entonces estoy dale que te pego con las susodichas, dibujando sólo para poder pintar, algo inusual en mi ya que lo que se dice pintar era mi asignatura pendiente.

Pero, quién es este tío y porqué un servidor le ha rebautizado con ese apodo?.
Este individuo tiene toda la pinta de darle a la farlopa, al sulfato de la tocha, a Blancanieves y los siete tronchones, a la línea recta, a polvo de ángel, al esqui de mesa, a empolvarse la nariz... y claro, cuando uno está enganchado como él lo pasa muy mal hasta que llega el finde y puede dedicarse a limpiar el polvo de los cajeros automáticos entre cubata y cubata. Por eso, el muy goloso, se dedica a joder al personal cuando tiene el mono (es decir, siempre) y prohíbe leer y utilizar material pictórico.
